El concepto de `cultura transformadora´
como eje
Necesitamos una cultura transformadora
que critique a lo existente, que plantee propuestas (en plural),
que favorezca la acción-reflexión
y que se genere en este mismo proceso, creando
contextos socioculturales alternativos. Necesitamos que
esta cultura-acción sea la del máximo de sectores
populares, que sea incluyente y aumente la participación
y el poder de los grupos críticos y de los grupos dominados.
La cultura transformadora es aquella que ayuda
a comprender y actuar críticamente en la sociedad en la
que vivimos, para superar la desigualdad y la dominación,
es lo que queda después de cada experiencia transformadora,
y que a la vez aumenta el bagaje para la siguientes. Cultura transformadora
es, podemos decir, la que une la utopía
con las realidades concretas que necesitan superarse, la
que favorece la participación de quienes más viven
o sienten los problemas direcciones transformadoras.
La cultura transformadora conecta a los diferentes
movimientos sociales entre sí, va construyendo (no
sólo definiendo) algunas claves comunes y va estimulando
el enriquecimiento mutuo, mediante la diferencia: de temas, pero
también de formas de actuar e incluso de ideas. No hace
falta uniformidad, ni competencia entre temas y ámbitos;
lo que resulta imprescindible es construir conjuntamente algunas
claves compartidas (de acción, de valores y de pensamiento),
o, lo que es lo mismo, una cultura común que trascienda
y que conecte cada tema, cada problema, cada actuación.
[¿Por qué no llamarla `cultura crítica´?
No es mal nombre, pero hay quienes sólo incluyen dentro
de ese concepto lo artístico-erudito, la cultura especializada...
y sólo referido al conocimiento, al pensamiento y a la creación
personal. `Cultura transformadora´ deja más clara
la imposibilidad de desvincularla de la acción, que, además,
necesariamente ha de ser social y no sólo individual]
> Cultura crítica
y transformación social Ideas
para comenzar una tertulia
|